Tal y como vimos la semana pasada, los revestimientos alimenticios están en alza porque conservan la comida durante más tiempo. Esto permite mantener las propiedades de las materias primas y conservar la calidad de los productos destinados a la ingesta humana.
Por ello, en Fetasa trabajamos en el revestimiento de depósitos alimenticios como es el caso de los depósitos de vino. Pero, ¿cuántos tipos de depósitos de vino existen?
Pues en el blog de hoy te lo contamos todo:
Tipos de depósitos de vino
Cemento
Un poco más moderno pero también muy tradicional son los depósitos de cemento. La principal ventaja de este material es que tiene muy buena inercia térmica, es decir, que al vino le cuesta mucho cambiar de temperatura y esta capacidad es muy interesante para la crianza, pero puede ser un problema en la vinificación.
Estos depósitos no son muy caros, aprovechan muy bien el volumen ya que son cuadrados (aunque ahora se hacen de todas las formas) y en su parte superior se pueden poner otros depósitos.
El inconveniente principal de estos depósitos es que son muy pesados y en su mayoría fijos, no se pueden mover del sitio una vez puestos. El cemento puede estar revestido de resinas epoxy alimentarias o azulejos de vidrio para conseguir una mejor limpieza, pero sigue siendo un inconveniente en los depósitos clásicos.
Por ello, si necesitas un depósito para vino no dudes en contactar con nosotros. Desde Fetasa estaremos encantados de atenderte.