Al igual que la resina epoxi, la pintura epoxi es muy resistente y versátil para cubrir y proteger las superficies. Sus principales ventajas en formato pintura son la gran resistencia química y al roce, debido a la mezcla de distintas densidades y materiales complementarios, y que no contiene disolventes, es decir, no desprende olores. Pero, además de estás ventajas hoy te vamos a contar 3 razones por las que debes escoger esté tipo de pintura.
La aplicación de la pintura epoxi es a través de un rodillo y tiene un tiempo de secado muy rápido. El tipo de pintura podría definirse como un todoterreno y muy duradero, algo que las pinturas tradicionales no pueden ofrecer. Asimismo, su viscosidad genera una capa plástica fina muy adherente y con acabado liso y cubriente. Por ello, es perfecto para pintar sobre cerámica en cocinas y baños.
Este tipo de material es totalmente impermeable y se puede limpiar con un paño húmedo con agua y jabón. Su resistencia a cambios fuertes de temperatura les hace ser perfectos para estancias, donde hay mayor calor o humedad.
Con la pintura epoxi no tienes limitación de colores, ni de acabados. Podrás explorar tu creatividad con la infinidad de posibilidades que te ofrece este tipo de pintura. Podrás hasta encargar el color a la carta, es decir, totalmente personalizado, y darle un toque único a tus suelos, paredes y techos. Además, puedes escoger entre dos acabados: la versión brillo, que te dará una mayor luminosidad a la estancia y un efecto más elegante, o el acabado suave, que te ofrece un resultado satinado mate.
Como puedes leer, la pintura epoxi es todo ventajas desde el primer paso de instalación, hasta el último de mantenimiento en el hogar. Contando siempre con la opción de que se puede adaptar al completo a tu hogar y darle ese toque tan personal.