Uno de los productos estrella de Fetasa, la resina epoxi, ha venido empleándose desde hace tiempo en el mundo de la restauración debido a sus idóneas características, convirtiéndose así en un elemento clave para la recuperación y mantenimiento de un edificio de interés cultural.
Pero la importancia de recuperar obras arquitectónicas no es algo nuevo. Desde la Antigua Grecia se ha venido considerando la arquitectura como el arte de diseñar y construir edificaciones y debido, precisamente, a dicha consideración, se sabe que cualquier edificio levantado transmite belleza, pero también una historia.
A pesar, sin embargo, del enfoque artístico tan antiguo que tiene la arquitectura, los arquitectos no comenzaron a preocuparse por la recuperación y el mantenimiento de los edificios hasta el siglo XIX.
Durante esta época, las escuelas de arquitectura comenzaron a incluir en sus estudios técnicas de restauración de monumentos – así ocurrió con la Escuela Especial de Arquitectura de Madrid- y desde la administración pública empieza a aprobarse políticas de tutela y conservación.
Así, la Administración del Estado, a través de los Ministerios de Gracia y Justicia y de Fomento y de Educación y Cultura después impulsó la actividad pública de tutela y restauración del patrimonio histórico español.