Existen diversos factores que determinan la elección del suelo para nuestros exteriores. Para elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades, es necesario evaluar factores como el clima, la humedad, las personas que habitan en la vivienda y el nivel de mantenimiento.
Estos factores te ayudarán a determinar si necesitas un suelo más resistente al sol o a la humedad, con más agarre para evitar accidentes por superficie resbaladiza, de madera, cerámica o piedra natural, dependiendo del estilo de tu vivienda.
Tomando en cuenta los factores expuestos, te explicaremos cuáles son los diferentes tipos de suelo exterior:
Los suelos de madera son ideales para jardines y terrazas. Absorben menos calor que los suelos de obra. Por esto, son muy agradables. Además, aportan calidez y naturalidad a tus exteriores.
Este tipo de suelo requiere mucho mantenimiento para mantenerlo en perfecto estado.
Si tienes un espacio amplio y quieres darle un toque rústico te recomendamos utilizar este tipo de suelo. Es uno de los más resistentes a la lluvia, el calor, la humedad o el hielo.
Además, es fácil de limpiar y mantener.
Este tipo de suelo es ideal para viviendas con niños o personas mayores, ya que dependiendo de la opción que elijas pueden ser antideslizantes. Es una alternativa clásica y elegante, que se ajusta fácilmente a cualquier tipo de ambiente y es un material muy resistente.
Este tipo de suelo es ideal para espacios amplios, que requieren una superficie lisa y con poco mantenimiento. Es una de las opciones más económicas, además de que es muy resistente a las condiciones climatológicas.
Este tipo de suelo encaja a la perfección con casas de diseño moderno o funcional.
En Fetasa somos especialistas en revestimiento de suelos y te ofrecemos una asesoría personalizada, calidad y seguridad.
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